martes, 9 de agosto de 2011

EL ESTRES Y EL SOBREPESO

Los científicos continúan investigando y relacionando problemas de salud en nuestro organismo. Uno de esos estudios rebela la relación del estrés emocional con el sobrepeso. Por ello, desde este blog de salud te damos unos consejos para evitar estrés y sobrepeso.
El estrés y el sobrepeso están relacionados, ya que la ingesta de alimentos poco saludables o la ruptura de los hábitos alimenticios pueden desembocar en la falta de algunos nutrientes y en la consiguiente bajada de defensas. Esto hace que se debilite nuestro sistema inmunitario provocando estrés físico que, al mismo tiempo, origina episodios de estrés emocional, el cual intentamos mitigar auto recompensándonos a través de la comida. Es, sin duda, un círculo vicioso que hay que cuidar. 
Por ello, puedes seguir estos consejos para evitar el estrés y el sobrepeso 
1. Evitar beber café y alcohol, o tómalo de forma moderada.
2. Haz deporte al menos tres veces por semana. El esfuerzo físico moderado estimula la segregación de endorfinas, que influyen positivamente en nuestro estado de ánimo.
3. Mantén una dieta equilibrada. Te ayudará a mejorar tu estado de ánimo.
4. Ingiere alimentos ricos en vitaminas A, B y C y en minerales. Las frutas y verduras frescas, así como los frutos secos y el pescado al vapor te convienen.
5. Duerme 8 horas diarias. Procura seguir una rutina de sueño evitando dormir poco entre semana y aumentando las horas de sueño excesivamente los fines de semana.
6. Tómate al menos 15 minutos cada día para cerrar los ojos, respirar profundamente y dejar la mente en blanco.
7. Enfréntate al día a día con una actitud positiva. Piensa que todo pasa y busca recompensarte de los malos ratos de otra manera que no sea comiendo.
8. Cada cierto tiempo, escribe tu escala de valores en la vida y comprueba si se corresponde con el tiempo que dedicas a cada uno de ellos.
9. Acepta la ayuda de los que más te quieren.
10. Aprende a disfrutar de los pequeños placeres de la vida, sonríe más y trata de controlar tus emociones evitando caer en la tentación de refugiarte en la comida

Comer sano para tener una mejor percepción de la vida es lo que se desprende de uno de esos múltiples estudios sobre hábitos alimenticios.
Se ha comprobado cómo una dieta rica en vegetales, frutas, fibra, lácteos descremados y carne magra, mejora la salud física y mental, según el especialista Felice N. Jacka de la Universidad de Melbourne, encargado de llevar a cabo este estudio. Para ello, los investigadores evaluaron la dieta y los exámenes psiquiátricos realizados a 1.046 mujeres de la población australiana durante diez años y el resultado fue que 925 tenían trastornos anímicos y 121 depresión o ansiedad.
Entre los resultados obtenidos, el estudio demuestra que una dieta abundante en hamburguesas, pan blanco, pizza, patatas fritas, alimentos azucarados y cerveza, está asociada con más de un 50% de posibilidades de desarrollar trastornos depresivos. Por el contrario, una alimentación equilibrada supone un 30% menos de probabilidades de que las mujeres padezcan este tipo de enfermedades.
Además, el sobrepeso aumenta el riesgo de presentar diversos problemas de salud graves como la diabetes o la hipertensión. La medida más útil para determinar si existe sobrepeso u obesidad es el Índice de Masa Corporal.
Parece que con este tipo de estudios se rompe la idea de que la comida rápida mejora tu estado de ánimo, y según cuentan es al revés: una dieta sana para una mente sana. Sea como fuere, comer sano siempre es la opción más recomendable.

Busca la mejor manera de combinar los alimentos que tienes que tomar en tu dieta. Haz las comidas a la plancha, de esta forma, evitarás comer grasa. La comida a la plancha es muy saludable y muy sana. Cocinar es divertido y puedes hacerte tu dieta sana, divertida y apetecible. Hay que crear, como los grandes chef. Piensa que el truco está en la pirámide nutricional. Si eres capaz de mantenerla, tu dieta será sana. El objetivo será, por tanto, aplicar la pirámide a nuestra alimentación. Y jugar con los alimentos, hacérnoslos apetecibles, que seguro que sabemos. No es tan difícil